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sábado, 8 de septiembre de 2012

El Problema de la Educacion Militar


“Para esos adolescentes existe un bajo deleite en compartir y exhibir un poco lo peor de sí mismos; poco a poco el colegio va creando en cada cadete una horrible vergüenza de ser manso, de ser bueno, de caer alguna vez en la execrable debilidad de conmoverse…. Padres, tutores, oficiales, todos parecen estar de acuerdo en que ‘hacerlos hombres’ es apenas un eufemismo para designar la verdadera graduación, el formidable cometido de la escuela: hacerlos crueles.”


La educación militar crea gente capaz para la guerra, pero que no necesariamente esta capacitada para vivir en una sociedad. Los valores que se enseñan son aquellos de ser fuerte (no mostrar debilidades e implementar la fuerza propia sobre los que si son débiles), respetar a la autoridad, mantener el orden y pensar estratégicamente. Sin embargo, mientras que se enseñan estos valores, también existen externalidades negativas que hacen que los cadetes sean agresivos, crueles y en algunos casos abusivos. En la novela “La Ciudad y los Perros” de Mario Vargas Llosa la mayoría de los cadetes que se mencionan actúan de maneras socialmente inapropiadas en algún momento, con la excepción de El Esclavo (Ricardo Arana) que representa todos los valores opuestos a una persona educada en la forma militar y sufre por ello: “-Lo han asesinado -añade”. Ha sido el Círculo. Lo odiaban. Toda la sección lo odiaba, no tenían ningún motivo, él no se metía con nadie. Pero lo odiaban porque no le gustaban las bromas ni las peleas. Lo volvían loco, lo batían todo el tiempo y ahora lo han matado. -” (pg. 311) Por lo tanto se puede argumentar que en la mayoría de los casos la educación militar solamente crea personas crueles y agresivas, que están capacitadas para pelear en una guerra pero no para convivir en una civilización que se basa en concepto que el humano es principalmente bueno por naturaleza.


¿Qué significa la educación militar? En primer lugar destruye todas las estructuras psicológicas y emocionales de los cadetes para convertirlos en polvo y moldearlos según los conceptos y los preceptos de la vida militar. En otras palabras esto significa que convierte a las personas en una masa uniforme en donde los rasgos de la personalidad originaria se resienten: “Todo sentimentalismo es criminal.” (pg. 270) Por lo tanto se pierde todo signo de creatividad e individualidad lo cual les deja solamente la capacidad de recibir y ejecutar órdenes, sin dejar lugar para asumir responsabilidades o decisiones de ningún tipo si no están claramente especificadas en el credo militar. “La Ciudad y los Perros” refleja el paradigma de la educación militar en Perú, pero es un lugar común para todos los países de Latinoamérica donde los ejércitos en principio se fundan para proteger a los países y sus habitantes, pero usualmente se convierten en uno de los grupos de poder más poderos (pues tiene las armas) lo cual les permiten acceder al gobierno bajo la forma de dictaduras militares como se puede observar en numerosos ejemplos de la historia Latinoamericana. Al acceder al poder, para la cual no están capacitados pues no están imbuidos de valores democráticos y del respeto a las leyes que no sean otras que las del código militar, se convierten en una corporación económica-militar que expande sus ramificaciones a todas la parcelas de poder y valor económico sin prestarle importancia al bien de la gente. Esto se ejemplifica en la novela después de la muerte de Ricardo Arana cuando los oficiales se preocupan más por cuidar la reputación de la escuela que de la gravedad del asunto (se ha cometido un asesinato) y mienten para tratar protegerse: “Está en juego el prestigio del colegio, e incluso el del Ejército... Lo más sensato es mantener la tesis de un- error cometido por el propio cadete. Hay que cortar de raíz cualquier rumor, cualquier comentario. ¿Entendido?”” (pg. 275).



El Jaguar es un personaje clave en la novela, pues representa el cambio absoluto de una persona cariñosa y buena a alguien muy agresivo y cruel por ser educado bajo el método militar. Antes de su ingreso al Leoncio Prado, el Jaguar era un buen chico que estaba muy enamorado por Teresa y constantemente buscaba la manera de demostrarle su afección, aun y cuando casi siempre se acobardaba. No obstante, él siempre era bueno y cariñoso con ella, lo cual demuestra sus rasgos sentimentales (hasta se vuelve un ladrón para poder visitarla afuera del colegio y comprarle cosas aun y cuando tenía miedo y no tenía la intención volverse un criminal; lo hace por el desespero de no poder ser bueno con ella) que en la escuela militar desaparecen por completo. Es más en el Leoncio Prado, el Jaguar se convierte en una persona muy cínica y cruel lo cual llega hasta el punto extremo donde mata al Esclavo y luego continua hablando mal de él lo cual hasta le crea disgusto a Boa: “"Jaguar, no está bien eso de agarrárselas con un muerto, ¿por qué no le hacemos un zumbido?". Y él me dijo: "mejor te callas, eres muy bruto y sólo sabes decir estupideces. Cuidado con dirigirme la palabra si no te pregunto algo". Debe estar enfermo, ésas no son maneras de persona sana, enfermo de la cabeza, loco perdido.” (pg. 309) Claramente, la vida militar crea una persona completamente distante en el Jaguar pues este antes era un chico cariñoso y bueno se convierte en una persona vengativa, cruel e inhumana que constantemente busca como demonstrar su fuerza y su brutalidad.


En definitiva la educación militar crea en esencia personas crueles y agresivas que pierden el sentido y el respeto a los valores. Para ellos el fin justifica los medios, y el fin es el beneficio de la casta militar. Aquel que es manso o bueno es perjudicado por tener aquellas cualidades que aparentemente demuestran debilidad y aquellos que son fuertes e implacables son vistos erróneamente como “verdaderos hombres.”